Cuando una epidemia de peste se cebaba
con toda su crudeza en las poblaciones limítrofes, el Cabildo de Arjona adopta
el 24 de marzo de 1602 el cierre con candados de “la puerta de Jaén y
la puerta Nueva, y no queden más que la puerta de Córdoba, puerta de Andúxar y
puerta de Martos; y éstas se cierran al ponerse el sol y en ellas se reciban
testimonio de sanidad; y que nadie entre sin este requisito, bajo pena de
cuatro años de destierro; y que todos los caballeros cuantiosos guarde el
término a caballo, por turno”.
El conjunto de medidas tomadas por las
autoridades en aquella ocasión libró, a la postre, del contagio de la epidemia a la población, también contribuyó seguramente su sistema de amurallado que circundaba por aquel entonces a la villa de Arjona y que facilitaba el control riguroso de todas las salidas y entradas de personas y
mercancías a la misma.
Al declararse
erradicada la peste en los pueblos de la comarca, Arjona lo celebró
acordando “se hiciese el lunes siguiente fiesta solemne a San Roque, y
se trajesen las chirimías de Martos y música y bailes; y que saliesen todos los
oficiales con velas de libra y los porteros y alguaciles de media libra, y
fuesen en la procesión, y hubiese misa y sermón; y que aquel día nadie
trabajase, y que todos los clérigos dijesen misa a San Roque, y se pagase
todo.”
Fuentes:
-ANALES DE LA CIUDAD DE ARJONA. Ldo. SANTIAGO DE
MORALES TALERO. Ayto. de Arjona. MCMLXV.
-La imagen de portada pertenece al Archivo del Blog.
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