El 12 de noviembre de 1639 se reiniciaron las obras del Santuario de las Reliquias, templo planeado y dirigido por el arquitecto diocesano Juan de Aranda Salazar a instancias del Obispo de Jaén, Don Baltasar Moscoso y Sandoval.
En el edificio se superponen dos iglesias, con sendos pórticos, cuya fábrica se ejecutó de tal modo que a ambas se entran por terreno llano.
A la planta superior se accede desde la Plaza de Santa María, a través de una puerta flanqueada por dos pilastras cajeadas, características del renacimiento tardío, y rematada por un sencillo arco de medio punto apoyado en impostas.
Del entablamento arranca el segundo cuerpo, cuyo elemento principal lo constituye dos hornacinas enmarcadas en piedra moldurada cruciforme que en sus bases laterales exteriores ofrecen el detalle simbólico de dos relieves labrados en espiral.
Aranda Salazar dejó estipulado en su informe de arquitectura redactado en 1640, la colocación en ambas hornacinas de sendas figuras de piedra, de dos varas de altura (167 centímetros), aunque no entraba en detalles sobre el aspecto formal que deberían tener las estatuas dedicadas a los Santos Mártires.
Ta vez, esta indefinición fue la causa principal de que, a la postre, transcurriese el tiempo y el santuario se diese por finalizado en 1659, sin llegar a realizarse en piedra las efigies de los Santos Patronos.
Y así, vacías permanecieron las hornacinas hasta la actualidad.
Aranda Salazar dejó estipulado en su informe de arquitectura redactado en 1640, la colocación en ambas hornacinas de sendas figuras de piedra, de dos varas de altura (167 centímetros), aunque no entraba en detalles sobre el aspecto formal que deberían tener las estatuas dedicadas a los Santos Mártires.
Ta vez, esta indefinición fue la causa principal de que, a la postre, transcurriese el tiempo y el santuario se diese por finalizado en 1659, sin llegar a realizarse en piedra las efigies de los Santos Patronos.
Y así, vacías permanecieron las hornacinas hasta la actualidad.
El frontón, con el escudo del obispo impulsor de su factura, en su interior, dos pináculos rematados en bola en sus aristas superiores y una cruz labrada en piedra en el vértice superior, coronan esta portada.
Fachada del Santuario de las Reliquias a la Plaza de Santa María
El pórtico del edificio inferior, que da al paseo, es de estilo plateresco tardío. Los pilares que flanquean el vano están constituidos por grandes sillares
labrados con sobrias y sencillas cenefas que contrastan con la minuciosidad de la decoración del dintel, difícil de apreciar por las huellas que los rigores del clima ha dejado durante siglos.
Con idénticos elementos decorativos a la portada descrita más arriba, a excepción de la cruz, el frontón rebajado completa este conjunto arquitectónico porticado.
Fachada del Santuario al Paseo de los Santos
Todas las fotos pertenecen al archivo del blog.
Si te interesa conocer más información sobre la construcción de este santuario, haz clic sobre este enlace. Sobre el obispo impulsor de sus obras:
Dos retratos del Cardenal Moscoso y Sandoval.
Sobre las imágenes titulares de este templo:
Iconografía de los Santos Paronos de Arjona (I).
Iconografía de los Santos Patronos de Arjona (II).
No hay comentarios:
Publicar un comentario