viernes, 20 de enero de 2017

TAL DÍA COMO HOY DE 1273: Muere en la Vega de Granada el Rey Alhamar

Busto en bronce del Rey Alhamar, erigido en la Plaza de Santa María

    El veinte de enero de 1273, muere a los 77 años de edad el rey Alhamar al caer de su caballo cuando emprendía una expedición de castigo contra los walis de Málaga, Guadix y Comares, que habían invadido sus fronteras. El fatal accidente degeneró en una congestión y vómito de sangre, que acabó con su vida en una improvisada tienda de campaña, en la vega granadina.
    Su cadáver, embalsamado y puesto en ataúd de plata, fue enterrado en la mezquita mayor del Albaicín, aunque luego fue trasladado a la rawda de Sabica, en la Alhambra.
    Washington Irving, describió a este ilustre rey nacido en Arjona, (fundador de la dinastía Nazarí e impulsor de la construcción del palacio de la Alhambra) en estos términos:
    “Su reinado fue una larga serie de sucesos prósperos para sus súbditos. Dio el mando de sus numerosas ciudades a aquellos que se habían distinguido por su valor y prudencia y que eran más estimados del pueblo; organizó una política vigilante y estableció leyes severísimas para la administración de justicia.

    El pobre y el oprimido eran siempre admitidos en audiencia, y los atendía personalmente, protegiéndolos y socorriéndolos. Fundó hospitales para ciegos, ancianos y enfermos.


Monumento erigido en Arjona al rey Alhamar en mayo de 2001,
obra del escultor granadino Cayetano Aníbal González

    Estableció también carnicerías y hornos públicos.
    Trajo cañerías de agua a la ciudad, mandando construir baños, fuentes, acueductos y acequias, para regar y fertilizar la vega. De este modo reinaban la abundancia y la prosperidad en su hermosa ciudad; sus puertas se vieron abiertas al comercio y a la industria, y sus almacenes estaban llenos de mercancías de todos los países…
    … Aprovechó los intervalos de tranquilidad que la guerra le dejaba, para fortificar sus dominios y pertrechar sus arsenales, protegiendo al mismo tiempo las artes útiles, que dan a las naciones riqueza y poderío. Concedió asimismo premios y privilegios a los mejores artistas, fomentó la cría caballar y de otros animales domésticos, y la agricultura, aumentando la feracidad natural del terreno, por su iniciativa, haciendo que los hermosos valles floreciesen como el más bello jardín.
    También concedió grandes privilegios al cultivo y fabricación de la seda, hasta que consiguió que los tejidos hechos en Granada sobrepujasen a los de Siria en finura y belleza de producción.


Otra imagen del ilustre arjonero
    Igualmente, hizo explotar las minas de oro, plata y otros metales encontrados en las regiones montañosas de sus dominios, y fue el primer rey de Granada que acuñó monedas de oro y plata con su nombre, poniendo gran diligencia en que los cuños estuviesen hábilmente grabados…
    …Comenzó el magnífico palacio de la Alhambra, inspeccionando él mismo su construcción… y dirigiendo sus trabajos.
    Aunque espléndido en sus obras y grandes empresas, era modesto en su persona y moderado en sus diversiones. Sus vestidos no eran fastuosos, sino tan sencillos, que no se distinguían de los de sus vasallos.

Vista general de la Alhambra de Granada, recinto palaciego que decidió impulsar
el Rey Alhamar

Pasaba la mayor parte del día en sus jardines, y especialmente en los de la Alhambra, que había enriquecido con las plantas más raras y las flores mas hermosas y aromáticas, y allí se deleitaba en leer historias o haciendo que se las leyesen, y, en los momentos de descanso, se ocupaba de instruir a sus tres hijos, a quienes había proporcionado los maestros más ilustres y virtuosos…
    …Conservó sus facultades intelectuales y su vigor hasta una edad avanzada…”  

Las ciudades de Arjona y Granada le han dedicado al rey Alhamar sendas estelas, (la de Arjona fue destruida años después de su erección) que vienen a reconocer la personalidad del fundador de la dinastía de los nazaritas.                                         


ESTELA DE ARJONA
    Este monolito fue colocado a finales del primer cuarto del siglo pasado en la planicie de la 
Plaza de Santa María para honrar su figura, cercano al lugar donde se supone nació Alhamar. 
Varias décadas después, hacia 1957, sería destruido sin que se conocieran sus autores.
    En mayo de 2001, Arjona le dedicaría otro monumento en la Plaza de Santa María gracias a
los buenos oficios de un granadino y arjonero de adopción Francisco Izquierdo Martínez. 


    "Sólo Dios es vencedor. Que la gloria corone la memoria de Mohamed  Abu-Alhamar,  nacido en este lugar, en el año de la Hégira, de la noble familia de Beni-Nasar. Fue alcaide y rey de Arjona, monarca de Guadix, Huéscar, Málaga, Jaén y Granada. Edificó la Alhambra, plantó jardines, fundó hospitales y fomentó las ciencias, las artes, la agricultura, el comercio y la   artesanía. Fue piadoso,  valiente y noble  Murió en la batalla el 1273 (d. J.C.)."



ESTELA DE GRANADA
   El Patronato de la Alhambra le honra con la colocación de esta lápida colocada en la cuesta de los Gomeres, a la entrada de la Alhambra. La ciudad de Granada, con la rotulación de una de las principales arterias de su callejero. 






    BIBLIOGRAFÍA: 

 -ANALES DE LA CIUDAD DE ARJONA. Santiago de Morales Talero. Madrid, 1965.
 -LOS REYES NAZARITAS DE ARJONA. Santiago de Morales Talero. Consejero de número del Instituto de Estudios Giennenses.      
 -Las imágenes del Rey Alhamar pertenecen al archivo propio del blog.         

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