Los roscos de vino es un dulce típico tradicional y muy popular de estas fiestas navideñas que puede estar presente en cualquier mesa para poner el broche a una comida o para acompañar a una bebida caliente.
Es una
propuesta de repostería nada complicada de elaborar a base de ingredientes
bastante asequibles de conseguir.
Ingredientes:
-Un litro
de vino blanco
-Un litro
y medio de aceite virgen extra.
- Medio
kilo de azúcar.
-
Raspadura de un limón grande.
- Harina.
-Agua con
canela.
-Anís
dulce.
-Azúcar
glass.
Elaboración:
Ponemos el aceite a calentar y una vez desahumado lo
dejamos enfriar. (No es recomendable mezclar los demás ingredientes con el
aceite caldeado.)
A continuación,
añadiremos la raspadura de limón, el vino y el azúcar y removeremos durante un
minuto. Luego iremos añadiendo poco a poco la harina hasta conseguir, a base de
remover sin parar con una cuchara de palo, una pasta homogénea y sin grumos.
Dejaremos
reposar la masa durante quince minutos.
Luego
espolvorearemos previamente con harina el lugar elegido para la elaboración de
los roscos con el fin de evitar que la masa se adhiera y tomaremos porciones de
la misma de unos 25 gramos, que estiraremos manualmente hasta darle forma
alargada y cilíndrica. Para conseguir su forma circular uniremos los dos
extremos.
Una vez
precalentado el horno, colocamos los roscos en una bandeja algo separados, pues
al hornearse aumentarán de tamaño, y mantenemos en el horno a una temperatura
de 175º durante veinticinco minutos.
Por último bañaremos los roscos en agua mezclada con una pizca de canela o bien en anís dulce y rebozaremos con azúcar glass.
Por último bañaremos los roscos en agua mezclada con una pizca de canela o bien en anís dulce y rebozaremos con azúcar glass.
La imagen de portada
pertenece a cocinafacilisimo.com
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