Sobre los orígenes de la devoción en Arjona a los santos Bonoso y Maximiano (I). El 14 de julio de 1628, el Obispo de la Diócesis concede licencia para su acogida en patronazgo

    Tal día como hoy de 1628, el Cardenal D. Baltasar Moscoso y Sandoval, Obispo de Jaén, concedía en patronazgo a los mártires Bonoso y Maximiano al pueblo de Arjona, después de siete años de diligencias y averiguaciones.

    De manera muy sucinta abordamos en  las próximas líneas este asunto siguiendo la tesis de F. Antonio de Jesús María, dada a conocer medio siglo después de ocurridos los hechos, y, a continuación, reproducimos literalmente el documento expedido por la primera autoridad diocesana.

     En el año 1621 llega a Arjona el Doctor Francisco Bañez de Herrera, Catedrático de Prima de Teología en las Escuelas de Baeza. Movido de su devoción, durante su estancia en la villa visita la iglesia de San Martín. Allí, la curiosidad propia de hombre estudiado le lleva a transcribir una inscripción latina cincelada en mármol que servía de pedestal a una estatua de Adriano Augusto, que decía: “Al Emperador César, hijo de Divo Trajano, Adriano Augusto, Pontífice Máximo, catorce veces Tribuno; tres Cónsul, Padre de la Patria, dedica este simulacro el Municipio Albense Urgavonense”.

    Los conocimientos que había adquirido de Flavio Dextro y otros autores, llevaron al erudito personaje a asociar la villa de Arjona con el toponímico romano aparecido en la inscripción, que le vinculaba al mismo tiempo a los santos mártires Bonoso y Maximiano, decapitados en el año 308 por orden de Publio Daciano, Prefecto en las Provincias de España.

   Comunicó estas noticias a las personalidades de Arjona, exhortándolas a que recurriesen al Obispo de Jaén, el Cardenal D. Baltasar de Moscoso y Sandoval para que determinase sobre este asunto.

    Parece que el prelado no condescendió fácilmente a este deseo, pero mostró su disposición a la convocatoria de una Junta de Prelados y “hombres de conocidas letras y virtud”  para realizar las averiguaciones convenientes.

    Se dispuso primeramente comprobar si los citados Bonoso y Maximiano se hallaban en el Catálogo de los Santos; apareciendo, en ese sentido, en el Martirologio de las Iglesias Oriental y Occidental, con fecha de 21 de agosto.

   Comprobada su pertenencia al Catálogo de la Iglesia, “infalible testimonio de su Gloria”, a continuación se determinó demostrar la pertenencia de los mártires a la jurisdicción del municipio “por haber nacido, o padecido en él, o por título de patronato”.

   Una vez realizadas las diligencias necesarias, las oportunas informaciones concluyen que Arjona había sido “el dichoso lugar de su Triunfo”.

    Formado ya prudente juicio, el Obispo de Jaén cursa el 14 de julio de 1628 el siguiente escrito a todo el clero y al pueblo de la villa, otorgando licencia para acoger en patronazgo a los mártires Bonoso y Maximiano.

  

     ”D. Baltasar de Moscoso y Sandoval, por la Gracia de Dios y de la Santa Sede Apostólica, Cardenal de la Sta. Iglesia de Roma, Obispo de Jaén, del Consejo de S. M. & &. = Por cuanto estamos informados que los Santos Mártires S. Bonoso y S. Maximiano y otros de los cuales hace memoria el Martirologio Romano, á 21 del mes de Agosto, padecieron martirio en la Villa de Arjona en la persecución de Daciano, presidente de la Provincia Bética, que es Andalucía, como está comprobado de algunos fragmentos de Historias antiguas y autores graves y de mucha autoridad. Y hallándose la dicha Villa ilustrada y engrandecida con el martirio de tan insignes Mártires, por haber derramado en ella su sangre por Jesucristo Ntro. Redentor y Salvador, debe hacerse el reconocimiento y demostración debida á tan singular beneficio y merced del cielo, erigiéndolos por sus particulares Patronos y Abogados, dándoles el culto y veneración acostumbrada como á tales, y celebrando su fiesta con la mayor devoción y solemnidad que se pudiere. Por tanto, estimando sus santos y buenos deseos é intentos, damos á vos los Priores, Beneficiados, Curas y toda Clerecia, y vecinos de dicha Villa, que de aquí adelante recibáis y tengáis por Patronos y Abogados de ella á los dichos Stos. Mártires Bonoso y Maximiano, rezando de ellos con rito doble de primera clase con su octava del común de Mártires, y la Misa que comienza Sapietiam Sanctorum, con la oración, Epístola y Evangelio que le corresponde, y celebrando su fiesta este presente año y los demás á 21 de Agosto, que fue el día de su Glorioso Martirio. Y por mover á los fieles con el estipendio espiritual á la devoción de los benditos Santos, concedemos 80 días de Indulgencia á todos y cualesquiera persona que en el de su festividad ó vocación digeren ú oyeren misa; y mandamos á los Priores de dicha Villa lo publiquen y hagan saber al pueblo los Domingos y fiestas antecedentes al Ofertorio de las misas Conventuales; y damos licencia para que este año, el día 21 de Agosto, se haga procesión Solemne en dicha Villa á los insignes Mártires con las Parroquias y todos los Clérigos y Cofradías de ella, á los cuales mandamos que asistan en ella con sus cruces, sobrepellices é insignias, como en las demás procesiones generales, y que, en razón del dicho Patronato, se haga y entregue instrumento público y se nos remita un traslado auténtico de él para que se ponga en el Archivo de nuestra dignidad Episcopal.

     Dada en Jaén á 14 días del mes de Julio de 1628 años. = El Cardenal. = Por mandato del Cardenal mi Señor, Pedro de Aguilar, Secretario.”

Ilustración de 1905 que recoge la decapitación de los santos Bonoso y Maximiano

    BIBLIOGRAFÍA:

   D. BALTASAR MOSCOSO Y SANDOVAL. Autor: F. Antonio de Jesús
 María. Madrid, 1680.

    HISTORIA DE ARJONA Y SUS SANTOS PATRONOS. Autor: Juan
 González  Sánchez. Granada, 1994. Editado por Antonio Rivas Morales.

    Las imágenes están tomadas del libro de Juan González Sánchez.